17 de diciembre de 2014
Señor Presidente Constitucional del Ecuador Rafael Correa Delgado
Presente
Quienes suscribimos esta carta recibimos sorprendidos la noticia de que el gobierno del Ecuador decidió revocar el convenio de comodato establecido en el año 1991 para el uso del edificio de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, CONAIE. A nuestro juicio es evidente que las razones aducidas (la utilización del local para la rehabilitación de jóvenes con problemas de adicción) no son satisfactorias: un Estado como el ecuatoriano dispone de muchos lugares en mejores condiciones y ubicación para semejantes tareas. La medida carece de justificación.
Más que un acto de retaliación esto constituye una falta de respeto a la memoria y la historia de una organización a la que el Ecuador le debe luchas democráticas y transformaciones sociales extraordinariamente profundas y positivas. Más que un acto administrativo sin intención política, parece una prueba de sectarismo muy preocupante. Más que un acto aislado, parece el más reciente incidente de una sucesión de episodios de intolerancia hacia la crítica de diferentes movimientos sociales del más variado tipo.
En nuestra opinión, su gobierno no necesita semejantes exabruptos y pierde autoridad moral con esta lógica de afirmación de fuerza y de intimidación. No es tarde para rectificar. Sería un acto valeroso de inteligencia política y de generosidad de su parte si diera una prueba contundente de reconocimiento a las históricas gestas liberadoras de la más grande de las organizaciones de los pueblos y nacionalidades indígenas del Ecuador.
Los pueblos de nuestra América y las fuerzas progresistas del mundo entero no olvidan esa gloriosa historia. Usted tampoco debería ignorarla.
Atentamente
Envía tu firma (nombre, país, institución) antes del mediodía (hora de Ginebra-París) del martes 23 de diciembre de 2014, a las siguientes direcciones:
Alessandra Santillana:[email protected]
Pablo Ospina: [email protected]
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Otra carta ya enviada:
Quito 17 de diciembre del 2014
Muy estimado Presidente y amigo:
Nos extrañó mucho la decisión tomada por su gobierno de poner fin al convenio de comodato con la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) para la ocupación de su sede.
Esta disposición, además de ser un acto administrativo que nos parece arbitrario, tiene una carga simbólica que puede conllevar graves consecuencias, no solamente a nivel nacional sino también en el plano internacional.
Únicamente una convergencia entre los movimientos sociales y las organizaciones políticas nuevas, puede acumular bastante fuerza para vencer el poder del capitalismo.
Por eso le pedimos hacer uso de toda su autoridad para revisar esta decisión y permitir a la organización nacional de los pueblos y nacionalidades indígenas del Ecuador, que continúe sus actividades en el local que le fue concedido como simbólica reparación, en más de quinientos años de opresión.
Muy atentamente,
Samir Amin, presidente del Foro Mundial de Alternativas
Adolfo Peréz Esquivel, premio Nobel de la Paz
Miguel D’Escoto, expresidente de la Asamblea General del ONU
Marta Harnecker, MEPLA
Aurelio Alonso, Revista de la Casa de las Américas, La Habana
Eric Toussaint, coordinador el CADTM
Frei Betto, escritor
Francois Houtart, profesor emérito de la Universidad Católica de Lovaina
Claudio Katz, de la UBA
Leonardo Boff, eco-teólogo de la Liberación
Gianni Tognoni, secretario del Tribunal Permanente de los Pueblos
Bernard Duterme, director del CETRI
Pedro Casaldiga, obispo (Brasil)
Wim Dierckzsens, investigador, DEI, Costa Rica
Isidoro Alonso, Universidad de Sevilla
Boaventura de Suza, Universidad de Coïmbra
Isabel Rauber, de Buenos Aires
Juan José Tamayo, Universidad Complutense
Leo Gabriel, antropólogo, Austria